SEMANA SANTA

Hoy en día unos viven la Semana Santa como unas mini vacaciones, otros la viven con el fervor de la religión cristiana en la que se conmemora la pasión, muerte y Resurrección de Cristo. La Semana Santa comienza el Domingo de Ramos, día que representa la llegada de Jesús a Jerusalén y termina el Domingo de Pascua de Resurrección, día que Jesús salió del sepulcro. Se la llama Semana Grande o Gran Semana, por conmemorar los sacrificios para redimir a la humanidad. Calvario (lat. Calvaria, calavera) es el lugar de crucifixión de Cristo, en las afueras de Jerusalén, llamado Gólgota (cráneo) en hebreo. El origen del nombre, proviene posiblemente de la forma de la colina o de la costumbre existente de dejar en ese lugar las calaveras de los criminales ejecutados. Este sitio se encuentra actualmente dentro del recinto de la Iglesia del Santo Sepulcro. El Domingo de Ramos es costumbre adornar los balcones de las casas con hojas de palma bendecidos para que protejan los hogares durante el año. Pero no está de más saber que el que la Semana Santa “caiga” un año en el mes de marzo y otro en el mes de abril, no es por casualidad. Para los que no lo sepan, la razón es que La Pascua cristiana tiene lugar el domingo siguiente a la primera luna llena de la primavera, no deja de ser curioso la relación de la Luna con una festividad religiosa. En las escrituras no se habla de la festividad de la Pascua, aunque fuera una práctica temprana en el cristianismo, sino que fue una continuación de la Pascua judía con algunas connotaciones añadidas de otras culturas paganas en una clara relación con la fiesta de la primavera. Antiguamente en la cultura germánica se celebraba el festival del equinoccio de primavera, el 21 de marzo, una fiesta en honor a Eostre, diosa de la primavera, la fertilidad y la luz. En la mitología germana, en la primera luna nueva después del equinoccio de primavera se celebraba una fiesta dedicada a la diosa de la fertilidad Walburga, que derivó en que el día 30 de abril, las brujas alemanas celebrasen su aquelarre anual, conocido como la noche de Walpurgis. La Iglesia consagró este día a Santa Walpurgis, abadesa del monasterio de Heidenheim, con el fin de anular cualquier reminiscencia pagana. En la mitología romana, Flora era la diosa de las flores y de la primavera, en la mitología griega la renovación de la tierra en primavera estaba personificada por Perséfone, su equivalente latina era Proserpina, en la mitología germano escandinava, la diosa que simboliza el renacer de la primavera era Nerta.